El tractor es la maquinaría agrícola más usada y la principal causa de accidentes, muchos de ellos mortales. Más aún, este tipo de accidentes causan considerables pérdidas por daños materiales, gastos médicos, tiempo de trabajo perdido, pérdida de productividad, entre otros.
Y aunque los fabricantes se esmeran continuamente en dar mejoras a sus diseños, para hacerlos más seguros, lamentablemente todavía no han sido capaces de generar mecanismos que reconozcan situaciones inseguras.
Por este motivo, se debe prestar atención a los riesgos derivados de los tractores, de los aperos enganchados y de las condiciones del terreno. De esta forma los conductores de tractores que conocen su maquinaria y los peligros a que están expuestos, están mejor preparados para evitar los accidentes.
Seguridad ante todo
En este contexto, las áreas de peligro en un tractor incluyen sus partes mecánicas, los procedimientos de trabajo, las condiciones climatológicas, terreno irregular y cualquier otra causa potencial de riesgo. Por este motivo, siempre se aconseja:
– Llevar un extintor de nieve carbónica o polvo ABCE.
– Seguir las instrucciones de seguridad dadas por el fabricante.
– Quitar las llaves del contacto cuando el tractor no vaya a ser utilizado.
– Mantenimiento adecuado del tractor.
– Asegurarse de que el operario está formado para cada tipo de trabajo.
– Mantener a los niños alejados de la maquinaría agrícola.
– Nunca llevar pasajeros, a no ser que exista un segundo asiento. ocasiones son causados por distracciones de los conductores.
Del mismo modo, y para evitar vuelcos en el tractor, se sugiere evitar zanjas o pozos; girar cuando se conduce demasiado deprisa; y remolcar una carga demasiado pesada para controlarla.
La estabilidad depende de la posición del centro de gravedad, altura y anchura de vía del tractor. Cuanto más bajo esté el centro de gravedad y mayor sea la distancia entre ruedas, mayor será la estabilidad.