Es prácticamente obvio que si se le da el mantenimiento correcto a un tractor, este tendrá más años de vida útil. Y a diferencia de lo que muchos pueden pensar, existen algunas diferencias básicas entre mantener a un tractor y dárselo a otros vehículos, que bien cabe destacar, aun cuando no exista una guía de mantenimiento integral que se aplique a todos los tractores.
Paso a paso
1.- Estudiar el manual del usuario. El fabricante tiene instrucciones específicas para los cuidados básicos de tu equipo, y tienen la experiencia para dar los mejores consejos sobre cómo hacerlo. Si no se posee un manual, es hora de conseguirlo.
2.- Conseguir herramientas. El mantenimiento de un tractor requiere de varias llaves inglesas y otras herramientas más grandes que las de mantenimiento para autos, así que es necesario comprar o pedir prestadas las herramientas requeridas.
3.- Revisar regularmente los fluidos. Debido a que la mayoría de tractores para granja y jardín más pequeños no tienen una cabina para proteger el asiento, el panel de instrumentos ni los componentes de metal, es una buena idea almacenarlos en una caseta o garaje.
4.- Revisar la inflación de las llantas. Una inflación baja no siempre es obvia, debido a la forma. Las llantas traseras normalmente tienen entre 0.8 y 1.3 bar (12 y 20 psi) de presión de inflado, las delanteras pueden tener hasta 2.2 bar (32 psi). Las llantas traseras en los tractores de granjas se deben llenar de balasto, especialmente si se va a sacar alguna herramienta donde se requiere una máxima tracción.
5.- Cuidado con las correas y mangueras. Si el tractor está equipado con un sistema hidráulico, éste tiene mangueras y/o tubos de alta presión, y una falla en el conducto de fluidos puede provocar una falla en una pieza (bomba hidráulica), una pérdida de dirección, u otros problemas.